EL CONTROL DE LOS CUATRO CUERPOS INFERIORES
EL CHELA: Amado Maestro, ¿cómo podemos, individualmente, contribuir con la Luz del Mundo?
EL GURÚ: Bendito discípulo, nuestro Señor, Sanat Kumara, ha dicho que la Luz es liberada principalmente a través del mundo de sentimiento (el cuerpo emocional). El cultivo de esas cualidades de sentimiento que son como la Naturaleza de Dios Mismo — Paz, Pureza, Armonía, Balance, Amor, Tolerancia, Bondad, Compasión, Misericordia y Entendimiento, hacen que sus mundos de sentimiento emitan Luz. El esfuerzo para transferir y transmitir sus sentimientos de Esperanza, Fe, Confianza y Lealtad a Dios hacia dentro de la conciencia y sentimientos de todo lo que ustedes contactan les hace así, no sólo una Luz brillando en la oscuridad, sino también un conductor de Luz encendiendo a las almas de los hombres hacia un esfuerzo similar.
EL CHELA: Amado Maestro, ¿cómo puede alguien controlar los sentimientos que surgen espontáneamente desde el alma indisciplinada y que se precipitan para aumentar las sombras del plano Terrenal?
EL GURÚ: Bendito discípulo, existe sólo UN PODER mediante el cual pueden lograr cualquier cosa. Ese es el Poder de Dios que fluye a través de su propia Presencia individualizada y que da vida a su mundo de sentimiento. Cuando retornan la autoridad por la calificación de esa vida a su Presencia, y rechazan permitir a su mundo de sentimiento la licencia a la cual éste está acostumbrado en la captura y mala calificación de la Vida pura de Dios, entonces esa bella Presencia controla POR ustedes—y a TRAVÉS de ustedes— sus emociones.
EL CHELA: Amado Maestro, yo siento que el cuerpo emocional es un enemigo para el progreso espiritual. Al igual que San Agustín, estoy atormentado entre lo que sé que es correcto y lo que constantemente hago en la generación de discordia – que es malo. “El bien que debería, no hago y aquello que no debería, hago.” (San Agustín)
EL GURÚ: Bendito discípulo, esta no es una actitud correcta. Esta crea una rebelión en tu mundo de sentimiento. Tu cuerpo emocional fue creado por Dios para un propósito definido. El cuerpo emocional fue diseñado para emular los sentimientos de Dios y para expandir las cualidades de la Naturaleza de Dios en cualquier esfera que esté funcionando la conciencia individual. El cuerpo mental fue diseñado para crear la forma; el cuerpo de sentimiento para alimentar esa forma con la vida calificada. Es principalmente un regalo del Espíritu Santo, y cuando alguien peca en sentimiento, él comete “el pecado contra el Espíritu Santo” que el mundo ortodoxo ha descrito como imperdonable.
EL CHELA: Amado Maestro, ¿existe, entonces, tal cosa como un pecado de pensamiento, sentimiento, o acción ‘imperdonable’?
EL GURÚ: No, bendito discípulo, porque únicamente la perfección es eterna. Cada error, no importa cuán grande, es transitorio y pasajero. La misma Ley de la Compasión y la Misericordia, que es el Regalo del Séptimo Rayo, es la prueba manifiesta de que todos los pecados, equivocaciones, y errores pueden y serán limpiados cuando el individuo escoja solicitar los medios y las formas de hacerlo así. Los pecados de la naturaleza de sentimiento, sin embargo, son los más difíciles de superar porque el cuerpo emocional de la humanidad ha gobernado la mente y los sentidos durante muchas centurias. El cuerpo emocional es también el recipiente de más del ochenta por ciento de las energías de la corriente de vida liberada a través del Cordón de Plata hacia dentro del uso y control de la conciencia externa. Es, por lo tanto, el más poderoso de los instrumentos a través del cual el alma busca la expresión y maestría final sobre la energía, sustancia y vibración. Es mejor amigo y servidor que adversario.
EL CHELA: Amado Maestro, ¿cómo entonces, puedo yo hacer de mi cuerpo emocional mi amigo y servidor?
EL GURÚ: Bendito discípulo, mediante el entendimiento de que todos tus cuerpos -el mental, el emocional, el físico y el etérico-, son los servidores de la Sagrada Presencia que te hizo a ti, y que te da la vida, la inteligencia, y el ser. Retorna, luego, la autoridad por el uso de esos cuerpos a esa Presencia y chequea tus pensamientos, sentimientos, y acciones con lo que tu conciencia y corazón te dicen que deberían ser los pensamientos, sentimientos, y acciones de tu propio Cristo. Gradualmente ellos serán entrenados en servirle a Él.